miércoles, 16 de octubre de 2013

El 29/11 elecciones en ADEMYS. Momento de balance y perspectivas.

Las elecciones de ADEMYS se darán en un marco complicado de luchas y elecciones nacionales, con una profundización de la crisis económica y una inflación que empeora día a día las condiciones de vida de los docentes y de nuestros alumnos. Es un momento marcado por el rechazo a la política del gobierno nacional, expresado en las últimas elecciones, y también en la ciudad a la política del PRO. 


El gobierno nacional, con sus matices y diferencias, a partir de la Ley Nacional de Educación ha dado continuidad al proceso de los años noventa de privatización, fragmentación y vaciamiento de la escuela pública, ligando la educación a los intereses empresariales, con presupuestos lejanos a las necesidades reales, con jugosos subsidios a las empresas privadas de educación, aval a la Iglesia para entrometerse en los contenidos, paritarias que solo garantizan bajos salarios, más control sobre los docentes, intentos de evaluaciones estandarizadas, aumento considerable de la precarización laboral. Todas las medidas que el gobierno nacional tomó en educación muestran el carácter tramposo de su doble discurso. Esta política fue enfrentada nacionalmente por una extendida movilización docente, que se convirtió en uno de los sectores de trabajadores más movilizados del país, pese a la traición de la CTERA. Toda esa fuerza movilizada obligó a la conducción de esa central a tener que convocar a paros nacionales en 2012 y 2013.



La Ciudad de Buenos Aires no es una excepción. Con el gobierno de Macri sufrimos la misma política salarial (ya que se acepta el mismo índice trucho de inflación para calcular y pactar nuestros aumentos en cuotas), hemos vivido descarnadamente el cierre de cursos y grados, los cambios curriculares inconsultos, ataques constantes al estatuto docente y el avance en la eliminación de nuestras Juntas de clasificación, intentos de instalar las evaluaciones estandarizadas para ligarlas a nuestro desempeño y grandes negociados en infraestructura. A esto hay que agregarle la persecución sobre los maestros que enfrentaron el cierre de grados, el intento de disciplinar a docentes y estudiantes, las impugnaciones a los delegados de ADEMYS, entre otras cosas.

Pero todos estos años, desde las escuelas fue naciendo una corriente de maestros y profesores que defendieron todos los días, en la calle y en las aulas, en su tarea cotidiana, junto a cada comunidad educativa, a la escuela pública. Surgieron asambleas de distrito y distintas formas de organización genuina. ADEMYS fue el único sindicato que se hizo eco de todas estas expresiones, lo que le permitió enfrentar la política del macrismo y defender los derechos docentes con firmeza. Concientes de que la fragmentación sindical y la desafiliación de los docentes es muy alta, dio lugar a las asambleas abiertas con mandato de escuela, que permitieron organizar paros desde abajo, jornadas y festivales con la comunidad educativa, el apoyo a los estudiantes en las tomas, etc. Así fue con la ley de juntas, los cierres de cursos, la reforma de las técnicas o ahora con la NES y el “Instituto de Evaluación docente”. El sindicato mantuvo una posición firme en la pelea salarial frente a los dos gobiernos, llamando a paros y movilizaciones. 

Es cierto que no hemos logrado aún torcerle el brazo a la ofensiva macrista, pero hay que tener en cuenta que la política de Macri cuenta con un fuerte aval -por acción u omisión- del kirchnerismo, tanto en la Legislatura como en la dirección de la UTE. 

Sin embargo, sin ADEMYS peleando en las calles, todo hubiese sido peor y el gobierno hubiera avanzado en sus planes sin dificultades. Fueron varios los momentos en los que los docentes frenamos parcialmente y entorpecimos las políticas del gobierno. Logramos frenar el cierre de grados en el 2010 y frenamos una cantidad de cierres en el 2012, logramos que fracase el proyecto “maestro más maestro” y que una parte de los padres nos acompañe y defienda la escuela pública. Ese es un logro de los docentes, que fue posible, entre otras cosas, por contar con un sindicato verdaderamente autónomo de los dos gobiernos. 

También ADEMYS tuvo una activa solidaridad y coordinación con los sindicatos de todo el país que salieron a la lucha en estos años, expresados en los sectores combativos de SUTEBA y CTERA, así como con otros sectores de empleados estatales que se organizan en la CTA. 

El reflejo de estos aciertos se puede ver en el gran aumento de la cantidad de afiliados (casi se duplicó desde la elección anterior) y en los votos que ADEMYS obtuvo en las elecciones de Junta (logró el mismo número de votos que la UTE). Esto demuestra el respeto que se ganó el sindicato entre los docentes, a fuerza de pelear por la escuela pública todos los días. 



Por eso creemos que es un buen momento para dar un salto en calidad y hacer de ADEMYS un sindicato fuerte, que crezca en afiliados y en organización, que avance en su representación democrática de todas las escuelas, armando un gran cuerpo de delegados de escuela, que siga impulsando las asambleas de distrito como espacios para superar la fragmentación sindical, que fortalezca sus comisiones de trabajo para abordar con pluralismo las distintas problemáticas, para lograr mayor unidad por abajo con una verdadera representación y protagonismo de los docentes. 

Entendemos que, aunque en el sindicato conviven varias agrupaciones, este proceso de fortalecimiento de ADEMYS se logró, entre otras cosas, porque tuvo una conducción que dio impulso y posibilitó ese camino. Por eso decidimos unirnos a la LISTA DE UNIDAD DOCENTE, por ser la que mejor refleja y sintetiza esa experiencia, para darle continuidad y mayor fuerza para lo que viene. 

Lamentamos no poder recorrer este camino junto a otras agrupaciones que, a pesar de haber sido parte de la conducción, hoy no logran poner por delante la unidad que necesitamos.


Afiliate y fortalecé ADEMYS
Si sos afiliado, el 29 de noviembre votá al FRENTE DE UNIDAD DOCENTE.

Por un salario acorde a la canasta familiar, reajustable al costo de vida que nos permita trabajar un turno. No a los aumentos en cuotas y cifras en negro;

Contra toda forma de privatización de la educación, por la eliminación de los subsidios a las escuelas privadas.

Contra los planes de evaluación por desempeño, externos, centralizados, estandarizados, punitivos. Defensa del derecho estatutario a la participación y autoevaluación docente como parte del proceso educativo.

Contra las reformas al estatuto que destruyen el régimen de ingreso y ascenso por concurso. Defensa de los concursos públicos y la estabilidad en los cargos. Contra toda precarización y tercerización laboral;

Contra la reforma de la NES del gobierno nacional y la versión del PRO. Defensa de las escuelas artísticas y técnicas y de sus títulos.

Contra el vaciamiento de la OBSBA; por una obra social que garantice la mejor calidad de servicio de salud para todos los docentes;

Contra el cierre de grados y cursos. Derogación del decreto 1990.

Por la construcción de escuelas y jardines en la zona sur, para garantizar todas las vacantes que el pueblo necesita. Ni un pibe más fuera del jardín de infantes.

Defensa del Cepa como escuela de capacitación docente pública. Fuera las asociaciones privadas del Cepa, que tergiversan contenidos a favor de sus intereses. Por una capacitación docente continua y con relevo de tareas.

Creación de cargos en los EOE, ASE y en Educación especial para lograr gabinetes psicopedagógicos interdisciplinarios por escuela.

ñ Por una verdadera educación sexual integral, científica y sin prejuicios, acorde con la defensa de los derechos humanos y la diversidad sexual. Capacitación docente dictada por el Cepa.

Las mujeres trabajadoras de la educación sufrimos la doble opresión, ya que después de trabajar en dos turnos, nuestro trabajo continúa en el hogar al hacernos cargo de la mayoría de las tareas domésticas, mientras tanto seguimos planificando, corrigiendo y capacitándonos por nuestra cuenta. Entendemos que el sindicato debe tomar con más fuerza el tema de género, para avanzar en una representación gremial más justa.

Ademys fue parte activa de la lucha contra la trata de personas en casos de desaparición de alumnas e hijas de docentes. Proponemos redoblar la lucha contra la trata haciendo que la escuela sea caja de resonancia para la denuncia. Sostenemos la línea del escrache y la condena social para todos los abusadores.


Agrupación Enriqueta Lucero 

en el FRENTE DE UNIDAD DOCENTE